La cascarilla quemada es un subproducto de la producción de aceite de coco. Es un material ligero y poroso que se puede utilizar como fertilizante, enmienda del suelo o sustrato para plantas.
Este bulto de cascarilla quemada contiene 50 litros de material. La cascarilla está libre de malezas, patógenos, mesofilos y otros metales pesados que pueden ser nocivos para la salud humana.
Beneficios:
Es un fertilizante natural y sostenible que ayuda a mejorar la fertilidad del suelo.
Mejora la estructura del suelo y la capacidad de retención de agua.
Promueve el crecimiento de las raíces y el desarrollo de las plantas.
Ayuda a controlar las malezas y los patógenos.
Usos:
La cascarilla quemada se puede utilizar de diversas maneras, entre ellas:
Fertilizante: La cascarilla quemada se puede incorporar al suelo como fertilizante. Ayuda a mejorar la fertilidad del suelo y a proporcionar nutrientes a las plantas.
Enmienda del suelo: La cascarilla quemada se puede utilizar para mejorar la estructura del suelo y la capacidad de retención de agua. Ayuda a crear un suelo más aireado y drenado, lo que es ideal para el crecimiento de las plantas.
Sustrato para plantas: La cascarilla quemada se puede utilizar como sustrato para plantas. Es un material ligero y poroso que ayuda a mantener la humedad y los nutrientes de las plantas.
Instrucciones de uso:
Para utilizar la cascarilla quemada como fertilizante, incorpore 1-2 kg por metro cuadrado de suelo. Para utilizar la cascarilla quemada como enmienda del suelo, incorpore 10-20 kg por metro cuadrado de suelo. Para utilizar la cascarilla quemada como sustrato para plantas, llene el recipiente con una capa de 2-3 cm de cascarilla.
Precauciones:
La cascarilla quemada puede ser irritante para la piel y los ojos. Se recomienda utilizar guantes y gafas de seguridad al manipularla.
Almacenamiento:
La cascarilla quemada se puede almacenar en un lugar seco y fresco.